- Época de construcción: Siglo XII
- Estado: Restaurado
- Uso actual: Privado (Se puede ver por fuera)
- Tipología: Castillos
Se trata de una antigua castillo levantado sobre un pequeño otero, convertido más tarde en casa palacio y en la actualidad en vivienda particular. Se tiene constancia de su existencia a principios del siglo XII, ya que en el estuvo aposentado Alfonso I, el Batallador, antes de la conquista de Molina (1128). El castillo pasó a manos de la corona a la muerte de doña Blanca Alfonso, hermana de doña María de Molina, mujer de Sancho IV. Pedro I, el Cruel, cedió esta heredad a Íñigo López de Orozco y de ahí pasó a la rama familiar conocida como “los Mendoza de Molina”.
El castillo, de traza trapezoidal, contaba antiguamente con una torre del homenaje y de torres cuadrangulares en las esquinas de sus murallas y otras situadas en ellas, a modo de refuerzo.
Lo que hoy ha llegado hasta nosotros y que podemos apreciar es una gran casona que dispone de unos fuertes muros, algunos almenados, la antigua puerta que contaría con puente levadizo, por el que se accedería al castillo y al que le rodeaba un foso. Sobre sus muros se abren diversas ventanas que los bastardean y lo transforman, como se ha hecho con lo que parece un matacán convertido en ventana. El recinto debió contar con barbacana almenada, hoy en día desaparecida.
Bibliografía:
LAYNA SERRANO, Francisco. Castillos de Guadalajara, 1962